Dalias: ¡Como cuidar esta hermosa flor paso a paso!

Las dalias son flores coloridas y vibrantes que pueden alegrar cualquier jardín. Se presentan en una amplia variedad de colores, formas y tamaños, lo que las convierte en una elección excelente para cualquier jardinero. Sin embargo, si quieres que tus dalias luzcan sanas y florezcan durante todo el verano, es importante cuidarlas adecuadamente. A continuación te ofrecemos una guía completa para su cuidado, con consejos y recomendaciones que te ayudarán a mantener el mejor aspecto de tu jardín durante toda la temporada.

dalias

Plantar las dalias

Antes de empezar a cuidarlas, tienes que plantarlas correctamente. Las dalias crecen mejor en lugares bien drenados y a pleno sol. Lo mejor es plantarlas en primavera, cuando la tierra se haya calentado y después de la última helada del año. Para plantarlas, cava un hoyo de unos 25 cm de profundidad y afloja la tierra alrededor del hoyo. Después, puedes plantar los tubérculos de dalia de modo que la parte superior quede a unos 10 cm por debajo de la superficie del suelo. Regalas bien recién plantadas y deja que la tierra se seque antes de volver a regar.

Riego de las dalias

Regarlas es muy importante para que tengan el mejor aspecto posible. Estas rinden mejor cuando reciben unos 2,5 cm de agua a la semana. Sin embargo, no debes regarlas en exceso, ya que podría pudrirse la raíz. Debes regar tus dalias en profundidad una vez a la semana o siempre que la tierra parezca seca. También es importante evitar regar el follaje de las dalias, ya que puede provocar enfermedades foliares.

Cómo abonar las dalias

Para que crezcan robustas y florezcan abundantemente, debes abonar con regularidad. Puedes utilizar un abono de uso general, o uno específico para bulbos, una vez al mes durante la temporada de crecimiento. Es importante aplicar el abono según las instrucciones de la etiqueta. También debes asegurarte de regar bien  después de abonarlas para evitar que se quemen con el abono.

Cubrir las dalias con mantillo

Aplicar una capa de mantillo alrededor de las dalias puede ayudar a mantener la humedad del suelo, además de bloquear las malas hierbas. Puedes utilizar cualquier tipo de mantillo orgánico, como paja, virutas de madera o agujas de pino. Lo mejor es aplicar el mantillo en primavera, después de que la tierra se haya calentado y haya pasado la última helada. Debes aplicar el mantillo en una capa de 5 a 10 cm y alejarlo de la base de la planta para evitar que se pudra.

Poda

La poda es una parte importante de su cuidado, ya que puede mejorar su aspecto y ayudar a que florezcan durante toda la temporada. Empieza por eliminar el follaje muerto, moribundo o enfermo de la planta. También puedes quitar las flores marchitas y los tallos laterales que crezcan a partir del tallo principal. Podarlas ayuda a que crezcan más vigorosas y florezcan más abundantemente.

Protege las dalias

Estas son plantas relativamente resistentes, pero pueden ser sensibles a plagas y enfermedades. Para proteger a tus dalias de ellas, debes inspeccionar tus plantas periódicamente en busca de signos de problemas. Si observas alguna plaga, como babosas, o signos de enfermedades foliares, como roya, mancha negra u oídio, debes tratar las dalias adecuadamente con un fungicida o insecticida orgánico.

Cuidado de las dalias en otoño

Una vez que la temporada de crecimiento ha llegado a su fin y han pasado las primeras heladas, es hora de prepararlas para el invierno. Empieza por podar las dalias a unos 15 cm del suelo. Después, conviene aplicar una capa de mantillo, como paja o agujas de pino, sobre la zona de plantación para proteger los tubérculos de las temperaturas bajo cero. También es buena idea revisarlas periódicamente durante los meses de invierno y retirar los tubérculos dañados o podridos.

Conclusión

Las dalias son un complemento hermoso y vibrante para cualquier jardín, pero para que conserven su mejor aspecto es importante cuidarlas adecuadamente. Si sigues los consejos y recomendaciones de este artículo, te asegurarás de que tus dalias se mantengan sanas y florezcan durante toda la temporada. Desde plantarlas y regarlas, hasta abonarlas y protegerlas, el cuidado de las dalias es una tarea gratificante y agradable que mantendrá tu jardín con el mejor aspecto posible.

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